Buenos días una vez más y bienvenidos a www.onlinevalles.com. Este post tratará de una estrategia de éxito asegurado para todos aquellos community managers que quieran vender por internet.

Un ratón sale del agujero situado en la pared de la cocina, atraído por un fuerte e irresistible olor. El olor proviene de un queso, uno de los manjares preferidos del ratoncito. Solo el animal se dará cuenta de que el quesito era un anzuelo para atraerlo a una trampa de ratones cuando ya no tendrá ninguna posibilidad de escapar.
La trampa era de ratones, por eso había un quesito. Si la trampa fuera para hormigas, en vez de disponer de un quesito dispondría de azúcar.
El anzuelo es la pieza fundamental para que la trampa sea funcional. Por una parte vemos que el anzuelo sirve de atracción y además de selección. Un anzuelo concreto para atraer a un determinado animal.
En internet ocurre lo mismo. Queremos atrapar al usuario de internet en nuestro escaparate online, y esto lo podemos hacer con la técnica del “quesito”, es decir, con un anzuelo, que el community manager desplegará por Facebook.
Si os fijais, un sorteo de Facebook cumple exactamente esa función. Por una parte atraerá al público a nuestro perfil social, y por otra banda segmentará el público. Es decir, solo participará un determinado público con un interés común. Por último tiene de cumplir la característica “Echange” (Más adelante explicamos esto).
¿Cómo conseguir que un sorteo de Facebook segmente el público objetivo? Con el premio. Se han visto en Facebook concesionarios de coche sortear un viaje a Egipto o restaurantes sortear entradas para un parque de atracciones. Esas empresas consiguieron mucha participación pero poco retorno económico, precisamente porque no segmentaron el público. Los que están interesados en un vehículo, no tienen por qué ser los mismos interesados en un viaje, ni los que están interesados en un tipo de restaurante concreto son los mismos que desean ir a un parque de atracciones.
Un buen community manager podría aconsejar realizar un sorteo de “clases de conducción deportiva” si el concesionario fuera de deportivos, y para el restaurante aconsejaría sortear una cena para dos personas cada fin de semana.
Además, un sorteo ha de cumplir la función Echange. Es decir, los que quieran participar en el sorteo, no lo harán gratis. No les pediremos dinero pero si sus datos. Solo de esta manera el sorteo será rentable. ¿Para qué queremos sus datos? Para comunicarnos con ellos, y aquí erradica la importancia de que el premio segmente bien a los participantes, ya que si no los segmenta adecuadamente, los datos no los querremos para nada, ya que estaremos comunicándonos con una pequeña parte de los usuarios de Facebook (donde atrapamos a estos usuarios), y no al público objetivo.
Con el sorteo, conseguimos filtrar al público objetivo (solo si el premio segmenta) para posteriormente realizar acciones de marketing más agresivas como son campañas de email marketing, técnicas que sin datos no podremos realizar, aquí la importancia de los sorteos en Facebook.